Congresistas de diferentes bancadas dividieron opiniones al respecto.
Bogotá D.C., 24 de septiembre (Prensa Senado). Diferentes voces se escucharon este miércoles en la Plenaria del Senado sobre la última alocución del presidente Gustavo Petro en la Asamblea General de Naciones Unidas, producida ayer.
El Presidente Petro hizo esta semana su última intervención como Jefe de Estado en la Asamblea General de Naciones Unidas. Esto debido a que su mandato irá hasta el 7 de agosto del próximo año, semanas antes del siguiente encuentro del organismo multilateral.
En su discurso, el Presidente Petro reiteró que los municipios cocaleros son los más abandonados por el Estado, criticó la política internacional frente al medio ambiente y se refirió a la situación en Gaza y al conflicto en Medio Oriente.
Esta alocución generó reacciones encontradas en el Senado de la República.
El senador del Movimiento Aico, Richard Fuelantala, respaldó parcialmente el diagnóstico del Presidente, pero advirtió que los datos no coinciden con la narrativa presidencial.
Recordó que “los municipios en los que se siembra coca son los municipios más abandonados por el Estado”, como lo señaló Petro, pero añadió que al revisar las cifras “todo demuestra lo contrario”.
Explicó que en 2024 varios municipios recibieron inversiones por 804 mil millones de pesos, mientras que para 2025 la cifra proyectada es de 488 mil millones, lo que representa una reducción del 39 %.
El Senador Fuelantala resaltó que casos como, por ejemplo, el de Tumaco, en Nariño, que pasó de 364 mil millones a 231 mil millones, o El Charco, en el mismo departamento, que cayó de 36 mil millones a apenas 6 mil millones, ilustran la gravedad de la disminución.
“Los problemas estructurales de la Colombia profunda solo se solucionan con hechos y con gran inversión”, señaló el legislador indígena, pidiendo al Gobierno Nacional aumentar los recursos para las zonas más golpeadas por la violencia y el narcotráfico.
Desde la oposición, el senador del Centro Democrático Carlos Meisel criticó con dureza el enfoque presidencial y aseguró que “debido a ese manejo irresponsable del presidente Petro con la relación norteamericana, se va a seguir dificultando el clima bilateral que ha tenido este país con los Estados Unidos durante toda nuestra historia republicana”.
A su juicio, el mandatario no solo habló “sin pruebas” sobre supuestos operativos en el mar, sino que además “no es capaz de condenar en la ONU la tiranía de Maduro. Por el contrario, la protege y la defiende”.
Meisel también cuestionó la postura de Petro frente a la situación en Gaza, indicando que “los criminales degenerados de Hamas no justifican, bajo ningún punto de vista, la muerte de civiles y mucho menos de niños”.
En ese sentido, reprochó que el Presidente actúe como si fuera el único que se conmueve ante las tragedias humanitarias, cuando lo que el país espera es que “eleve la voz por Colombia” y se refiera a problemas internos como el Catatumbo, la crisis de la salud y la seguridad ciudadana.
“Yo quiero saber en qué país vive Petro”, expresó, concluyendo que el mandatario parece habitar “un país que varios hemos llamado ‘Petrolandia’”.
Por su parte, la senadora del Pacto Histórico Aída Avella defendió sin matices la postura de Petro y la calificó como una denuncia valiente frente a los intereses de Estados Unidos en América Latina.
Según Avella, el discurso “desenmascaró lo que quieren los Estados Unidos contra América Latina: un estado de guerra, porque están detrás de los recursos”.
La congresista aseguró que las denuncias del Presidente son acertadas, pues reflejan el cansancio de los pueblos de la región frente a hechos como los ataques a pequeños pescadores en el Caribe, “bombardeados por buques de la marina norteamericana”.