En gran parte del territorio nacional la campaña para renovar el Congreso está en riesgo por la actividad de organizaciones armadas. Preocupa el deterioro del orden público y hay desconfianza con políticas del gobierno.
Por: Jaime Arbeláez Ospina
Bogotá D.C., 28 de noviembre de 2025. (Prensa Senado). - A casi una semana de iniciar en firme la campaña política para elegir el nuevo Congreso de la República en marzo de 2026, tras el cierre el lunes 8 de diciembre del proceso de inscripción de listas y candidatos, crece la tensión y preocupación de senadores, especialmente de quienes aspiran a repetir, por la inseguridad y peligro latente en gran parte del territorio nacional, por la actividad de organizaciones armadas ilegales.
Según cifras del Gobierno nacional, 104 municipios presentan riesgos de orden público, lo que exige coordinación entre las instituciones, dijo el miércoles anterior el Registrador Nacional, Hernán Penagos, en el panel ‘Garantías para la integridad electoral en Colombia: Elecciones 2026.
“Se avecinan campañas al Congreso a la presidencia. Todos nosotros estaremos en las regiones, en las calles, en los pueblos, en los municipios y no nos sentimos seguros”, manifestó el senador de La U, Alfredo De Luque, y enfatizó que “vamos a asistir a un proceso electoral con circunstancias de seguridad que hay que atender con juicio”.
Y hay razón en el temor. El asesinato del senador Miguel Uribe Turbay; los atentados en Cauca al senador Temístocles Ortega y en el Huila al representante Julio César Triana, de los que, por fortuna, salieron vivos; y las acciones terroristas de alias Iván Mordisco, que amenazó al país con interferir en los comicios:
“Quisimos que el proceso electoral tuviera los menores traumatismos posibles, pero, ante la avanzada de sectores guerreristas no nos queda más que asumir una posición en defensa de los territorios, su tranquilidad y las determinaciones políticas alejadas”, afirmó, el senador De Luque.
Carlos Julio González, Cambio Radical, quien a mitad de año habría sido declarado objetivo militar de las disidencias, según contó un asistente a una reunión en la vereda San Antonio del Pescado, en el municipio de Garzón, con líderes comunales obligados a participar, dijo que desde el Senado ha reclamado una y otra vez al Gobierno Nacional pasar del diagnóstico a la acción en esta materia.
“El orden público se ha deteriorado a nivel nacional, y en el Huila las cifras son muy preocupantes. Hemos exigido medidas y acciones concretas que esperamos incluyan aumento y fortalecimiento del pie de fuerza, tecnología y videovigilancia, articulación y una intervención decidida y eficaz”, señaló el senador huilense.
En plenaria, el senador Nicolás Echeverry, Partido Conservador, se ha quejado de que existe una “ausencia total de política de Estado” para garantizar la protección de los congresistas. Y exigió que el Plan Democracia incluya un diálogo directo con las autoridades responsables de la paz y la seguridad electoral.
A la desconfianza que hay con el gobierno por los resultados de la ‘Paz Total’, se sumó esta semana que termina, la revelación de Noticias Caracol que la inteligencia del Estado estaría sirviendo a alias ‘Calarcá’.
El general del Ejército Juan Miguel Huertas, jefe del Comando de Personal, y Wilmer Mejía, alto funcionario de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI), aparecen en chats, correos, fotos, cartas y memorias digitales que reflejan una estrecha cercanía con jefes de las disidencias de las Farc.
Con ese escenario, y ante los hechos de inseguridad, el pasado miércoles 26 de diciembre el presidente del Congreso Lidio García Turbay, desde el Capitolio Nacional, coordinó una mesa de seguimiento para evaluar la seguridad de los congresistas, con presencia de funcionarios y autoridades de la Casa de Nariño, el ministro del interior Armando Benedetti y altos mandos de las Fuerzas Militares y de Policía.
El líder del legislativo, García Turbay, en diálogo con los periodistas reconoció que se ha mejorado el tema de la seguridad, pero dijo que persisten limitaciones logísticas que afectan la capacidad de respuesta.
“Ha habido avances muy favorables y tenemos que reconocerlo, pero, la Unidad Nacional de Protección no puede resolverlo todo. Las empresas proveedoras de vehículos dijeron que no tienen más carros disponibles, lo que genera un círculo vicioso”, manifestó García Turbay.
Auto protección
Mientras persiste el riesgo y la amenaza, a los parlamentarios les tocará aportar en su protección. En principio, se creará un mapa de movilidad ‘segura’ para anticipar riesgos y orientar los desplazamientos, especialmente en regiones con alertas activa, según se concluyó en la mesa de seguimiento.
El presidente del Congreso, Lidio García Turbay, anunció que las mesas de evaluación continuarán realizándose en las próximas semanas para asegurar que cada congresista cuente con condiciones adecuadas de movilidad y cuidado durante el proceso electoral.