Con un prólogo muy académico se destaca la potencia de un género rico en vértigo y unidad temática, “el cuento”. La Antología nos lleva por ese tránsito entre las voces clásicas y nuevas del cuento en Latinoamérica, permitiendo el disfrute de las descripciones casi gráficas de Quiroga; de las imágenes del mundo clásico, su transición al mundo moderno y los registros poéticos con la narración de Borges; la atmósfera de Arlt y de la dignidad de sus personajes, de la vertiginosidad del género a cargo de Rulfo, el maestro de muchos de los escritores del boom; de las tristezas de las ruralidades contadas tan maravillosamente por García Márquez; de la hondura de Inés Arredondo que cierra estas poéticas modernas.
El salto en el libro a las poéticas contemporáneas en el género de corto aliento es un cambio de estilos, de tonos, un saber dejar atrás el embrujo de los maestros primeros en este lado del mundo y adentrarse en otros recursos, en otras transgresiones, con Albalucía Ángel, Ricardo Piglia, Bolaño, Fresán, Rosero, Villoro, Guillermo Martínez.
Trece voces necesarias, trece lugares de enunciación distintos en esta comarca del mundo llamada Latinoamérica, trece plumas potentes