Soy esposo, padre de 5 hijos, y un ferviente defensor de la familia, a la que reconozco como la base de nuestra sociedad colombiana. Soy un hombre de fe, y estoy orgulloso de serlo, por eso he dedicado 17 años de mi vida a ser misionero católico.

Originario de Granada, Antioquia, considero que los dineros públicos son sagrados, por ello mi formación moral y mis estudios en finanzas, van a ayudar al buen manejo de los recursos, con esto lograremos transparencia y el impacto positivo que queremos.

Sé lo que es crear empresas desde abajo, lo he hecho toda mi vida, y también he sentido lo que es tratar de salir adelante contracorriente. Soy un servidor senador que llegó al Congreso gracias a la confianza de quienes me apoyaron creyendo en mí para defender la familia, el trabajo y la dignidad.