Política carcelaria debe sintonizarse con derechos humanos

Congresistas aseguran que existe resistencia y rechazo a crear condiciones para superar la crisis que registran las cárceles del país.
Por Eduardo López Hooker
Bogotá D.C., abril 20 de 2023 (prensa senado).- Con el propósito de recoger las distintas visiones y propuestas que permitan superar la crisis carcelaria y darle solución al estado de cosas inconstitucionales que se viven en los centros de reclusión, las comisiones primeras de senado y cámara, llevaron a cabo el foro Humanización Carcelaria, presidido por la senadora María José Pizarro Rodríguez , coalición pacto histórico.
Después de dar testimonio del sufrimiento que significa tener en prisión a un familiar o un amigo, lo que vivió en carne propia, la senadora Pizarro Rodríguez aseguró que “es una realidad tortuosa, casi de castigo perpetuo, la que se vive en las cárceles del país, la idea de este proyecto es quitarle cargas al sistema carcelario, en pro del sistema penitenciario, de las personas privadas de la libertad y de sus familias. En mi historia personal tengo un compromiso con esta iniciativa”.
Este espacio democrático, desarrollado en el Salón de la Constitución del Capitolio Nacional, contó con la participación de representantes de organizaciones de derechos humanos, abogados, personas que en algún momento estuvieron privadas de la libertad y hasta familiares de quienes aún se encuentran pagando condenas intramurales.
Daniela Bejarano, vocera del Semillero Cárcel, Sociedad y Construcción de Paz, dijo en su intervención que “nos motiva abordar la crisis carcelaria desde la creatividad y el respeto a la dignidad de las personas que se encuentran en prisión, desde el análisis de las causas que llevan al sostenimiento de un sistema judicial casi que exclusivamente en la prisión, al dejar de lado otras opciones de justicia restaurativa.
Entre tanto Germán Rodríguez del Equipo Jurídico de los Pueblos, señaló que para su gusto la reforma planteada al sistema penitenciario y carcelario es tímida, “porque modifica la pena máxima, pero deja intacta la pena mínima, que el régimen de penas debe sufrir cambios de mayor entidad a fin de reformar la política criminal punitiva”.
En las diferentes organizaciones son conscientes de la resistencia que existe para reconocer que la población detenida tiene derechos, y el rechazo de la sociedad y ciertos grupos de interés que “Desconocen que existen diversas formas de tratar el delito y de solucionar la crisis humanitaria que se vive en las cárceles”, aseguró Gustavo Gallardo de la Fundación Lazos de Dignidad.
El representante a la Cámara Alirio Uribe Muñoz, Coalición pacto histórico, aseguró que en el estudio de la reforma no se hace un análisis racional de quienes se oponen a la humanización carcelaria, lo que fue respaldado por Claudia Cardona, psicóloga en la organización protectora de derechos humanos, Corporación Humanas, quien señaló que “humanizar este sistema requiere armonizar la política criminal con principios y normativas que protejan los derechos de las personas privadas de la libertad, principalmente las mujeres.
En el mismo sentido, el representante Uribe Muñoz insistió: “Aquí no hay política de resocialización, aquí lo que hay es una política de venganza hacia las personas privadas de la libertad”.
Al cierre del encuentro la senadora María José Pizarro reconoció que la idea de humanizar las cárceles no cuenta con ambiente favorable en el Congreso, pero invitó a todos los sectores a adelantar un diálogo constructivo, con desprendimiento de prejuicios y pensando en la situación de violaciones de sus derechos que viven las personas privadas de la libe