“Que el sacrificio de Miguel Uribe Turbay no sea en vano”: presidente del Congreso

Al culminar la cámara ardiente en el Salón Elíptico del Capitolio Nacional, de su amigo y colega senador Miguel Uribe Turbay, el presidente del Congreso Lidio García Turbay, en tono firme y reflexivo,  instó a todos los sectores políticos y sociales de Colombia “a bajar el tono al debate, eliminar las agresiones y reconocer la diferencia como una riqueza, no como una amenaza”.

Por Johan Nassar Hower.

Bogotá, D. C, 13 de agosto de 2025 (Prensa- Senado). -Durante la ceremonia de despedida del féretro del senador Miguel Uribe Turbay desde el Salón Elíptico del Capitolio Nacional, elpresidente del Congreso Lidio Arturo García Turbay rindió homenaje póstumo al senador Miguel Uribe Turbay, asesinado en defensa de sus ideales, y lanzó un contundente llamado a la reconciliación política, al respeto por las diferencias y al fin de la polarización en Colombia.

En medio de un profundo sentimiento de dolor y consternación, Lidio García abrió su intervención destacando que el país se encuentra “unido por el dolor” ante la pérdida de un “amigo entrañable y luchador incansable”. Recordó los 64 días de esperanza y plegarias que acompañaron la lucha por la vida de Uribe Turbay, y lamentó que su luz se haya apagado “en plena primavera”.

El presidente del Congreso subrayó que Miguel Uribe representaba el sueño de una Colombia sin odios, reconciliada, con instituciones firmes y oportunidades para todos. “Ese sueño no muere con él. Ahora nos corresponde a nosotros hacerlo realidad”, afirmó.

“Basta ya de rupturas, de polarizaciones, basta ya de violencia. No más combates en las palabras, no más divisiones en los corazones”, recalcó García Turbay. 

El llamado incluyó una exhortación a que el sacrificio de Miguel Uribe Turbay sea un punto de inflexión hacia la unidad nacional: “Que su memoria nos empuje hacia una nación capaz de vivir en concordia y descansar en paz”.

La ceremonia concluyó con un mensaje de solidaridad a la familia de Uribe Turbay y un compromiso expreso de que su legado inspire las decisiones políticas y sociales en favor de la reconciliación.